Es muy sencillo y versatil, ya que lo puedes rellenar de lo que quieras, tanto dulce como salado. Yo en este caso lo hice con canela y nueces, pero puedes rellenarlo de nocilla, sobrasada, pate, queso con bacon y jamón... Lo que os apetezca... Probad y arriesgad, jeje.
Podemos doblar la cantidad de los ingredientes y hacer dos kringles.
Ingredientes
Para la masa:
30 g de azúcar
1 zeste de limón sin parte blanca
120 ml de leche
30 g de mantequilla
15 g de levadura prensada
1 yema huevo
300 g de harina de fuerza
1 pizca de sal
Para el relleno:
50 g de mantequilla
60 g de azúcar
2 cucharadas de canela
60g de nueces picadas (o del fruto seco que quieras o una mezcla)
Para el glaseado:
1 clara de huevo
50 g de azúcar glass
Empezamos preparando la MASA
- En el vaso de la thermomix ponemos el azúcar y la piel del limón y trituramos 30 segundos velocidad 5-10.
- bajamos con una espátula lo que queda en las paredes y añadimos la leche, la mantequilla y la levadura y programamos 1 minuto, 37ºC, velocidad 2.
- Añadimos la yema y batimos 4 segundos a velocidad 3.
- Incorporamos la harina y la sal y amasamos 2 minutos a velocidad espiga.
- Retiramos la masa con la que hemos hecho una bola y la metemos en una bolsa hasta que doble su volumen (aproximadamente 1 hora).
Mientras sube preparamos el RELLENO
- Precalentamos el horno a 180ºC.
- Sin lavar el vaso, introducimos la mantequilla, el azúcar y la canela y mezclamos 1 minuto a 37ºC y velocidad 2.
Preparación:
- Cuando haya doblado su volumen, estiramos con el rodillo en forma de rectángulo fino (aprox. 30x40) sobre la encimera espolvoreada de harina para que no se pegue.
- Untamos con la mezcla del relleno y espolvoreamos los frutos secos picados.
- Vamos enrollando por la parte más ancha formando un rulo y hacemos un corte transversal con el cuchillo, dejando sin cortar un extremo.
- Se va cruzando la masa como si fuese una trenza y se unen los dos extremos para dejar un rosco.
- Horneamos durante 20 minutos y mientras preparamos el glaseado, mezclando la clara con el azúcar glass.
- Cuando saquemos del horno nuestro kringle, que habrá dejado un olor increíble en toda la casa, lo pintamos con el glaseado y dejamos enfriar antes de comerlo.
Preparaos para probar un bocado exquisito...
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